Le descubrieron cubierto de sueños sobre la cama. Sin señales de violencia. Nadie se explica cómo pudo ocurrir, parecía normal y nunca dio problemas en el barrio. Algunas personas que le conocían contaban que últimamente estaba como ausente, pero no le dieron importancia. Se busca a los cómplices del suceso, aunque por los cálculos realizados por la policía podrían andar ya muy lejos, quizá en otras sábanas que hace tiempo dejaron de ser inquietas.