La matemática del amor
no existe:
Sencillamente transcurre
entre esta felicidad y aquel
beso.
No busques la ecuación
de eso que sientes.
Vive su trama
como un cuento
del que eres
un afortunado protagonista.
"Bienvenido a mi casa. Entre libremente por su propia voluntad. Deje parte de la felicidad que trae."
La matemática del amor
no existe:
Sencillamente transcurre
entre esta felicidad y aquel
beso.
No busques la ecuación
de eso que sientes.
Vive su trama
como un cuento
del que eres
un afortunado protagonista.